Tipos de maderas para las barricas de vino

Curiosidades, Vino

La utilización de las barricas lleva años ligada a la historia del vino. Por eso hoy desde Valtea, queremos desvelaros algunos de los secretos mejor guardados de los toneleros. 

¿Por qué se almacena el vino en barricas? 

La barrica, también conocida como cuba o tonel, oxigena el vino y le transfiere unos matices u otros dependiendo de la madera escogida. 

Antiguamente, se empleaban para pisar las uvas, fermentar los mostos y criar los vinos. A día de hoy, se emplean para conferir ciertas cualidades aromáticas a los vinos o para envejecerlos bajo condiciones determinadas que solo estos recipientes pueden conseguir.

¿Quién los fábrica? 

Los artesanos especializados en la fabricación de barricas, barriles, cubas, fudres… se les denominan como toneleros. ¡Es toda una maestría!

Hay toneleros que hacen todos los procesos a mano igual que lo hacían nuestros antepasados. Pero lo cierto es que, ha sido en gran parte sustituido por máquinas que realizan las principales operaciones de la fabricación y ensamblado.

¿Qué tipos de barricas existen?

La elección de la madera con la que el tonelero elabora la barrica es decisión del enólogo. Este elegirá el tipo de madera según sus necesidades y el tipo de vino que quiera conseguir. 

En el ensamblado de la barrica y tostado de las duelas es donde entra el juego la verdadera maestría y el saber hacer de los artesanos toneleros.

Lo habitual es calentar las duelas a unos 200 ºC durante 20-25 minutos, tiempo en el que se produce el tostado de las mismas, y en el que también se producen cambios en los componentes químicos de la madera. Liberándose aromas característicos de las barricas, como vainilla, coco, especiados, torrefactos y ahumados. 

Según el grado de tostado de las duelas la intensidad y el tipo de aromas. Desde suaves especiados en las de tostado suave, hasta intensos aromas torrefactos y ahumados en las de mayor tostado. 

El tipo y calidad de la madera empleada, así como la maestría y experiencia del tonelero también son factores de gran importancia en el resultado final del vino. 

Tipos de madera utilizadas en las barricas 

Roble francés

Las maderas de roble francés son más ricas en aromas a frutos secos, vainilla, pan tostado o miel. Este material es más blando que el roble americano, la oxigenación del vino es más lenta, por eso, proporciona sabores suaves y delicados. 

Roble americano

La madera es más resistente, dura y permeable, lo que se traduce en toques mucho más potentes, que se consiguen de una manera mucho más rápida. Aporta aromas fuertes como el cacao o café, además suele transferir menos taninos.

Roble español

Esta madera es usada para crianza de vinos tintos, posee un gran potencial enológico pues proporciona matices avainillados y ahumados.

Acacia

Se distinguen dos variedades dependiendo del grado de tostado que tenga la madera, si no está tostada se utilizará en vinos blancos debido a los toques frescos que transmite. Si por el contrario está tostada parcialmente también puede destinarse a la conservación de vinos tintos.

Cerezo

Existen dos tipos de barricas, ambas sirven tanto para tintos como blancos, cuando dispone de un nivel de tostado medio aporta matices mucho más intensos a ciruelas o cerezas.

¿Qué significa un Rías Baixas en Barrica?

Cuando los vinos blancos de Denominación de Origen Rías Baixas son sometidos a un proceso de envejecimiento en barrica de madera, estos deberán comercializarse como Rías Baixas Barrica. Tal como lo índica el Pliego de Condiciones de la Denominación de Origen Rías Baixas

De modo que, se catalogaron como Rías Baixas Barrica cualquier vino elaborado en la zona geográfica a partir de variedades blancas autorizadas por la D.O. Rías Baixas. Estos deberán seguir un proceso de elaboración similar al de los vinos blancos, con la diferencia de que permanecen en crianza en barricas de madera, de un tamaño no superior a 600 litros, y en su etiqueta se detallará cuánto tiempo ha permanecido en esas barricas. 

Además los Rías Baixas Barrica, pueden complementar su envejecimiento con la crianza en depósitos de acero o la evolución en botella. En general, son vinos con aromas tostados, ahumados, de vainilla y frutos secos.

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